Cuidarte, también es cuidar a quienes te esperan... Reducir la tasa de fallecidos y lesiones permanentes en accidentes de tránsito... Es tarea de todos. Es necesario que consideres: ¿Cuánto cambiaría la vida de mis seres queridos si yo faltara?, ¿qué pasaría con la vida de mi familia si yo quedara incapacitado y alguien debiera cuidarme permanentemente? De esa manera comprenderás, que abrocharte el Cinturón de Seguridad o usar el Casco abrochado, es un acto de responsabilidad que te debes y le debes a tus seres queridos. Somos Víctimas de nuestras propias creencias... Tu también te cuentas la historia del "A mi no me va a pasar" Pero en cada esquina, en cada cuadra, cada día que conduces con lluvia, cada vez que conduces con el sol de frente, cada vez que caminando vas a cruzar una calle... dependes también de lo que otro usuario de la vía pública va a hacer. ¿Puedes asegurar que siempre van a respetarte la preferencia? ¿puedes asegurar que siempre el otro conductor viene atento? ¿puedes asegurar que todos los vehículos que circulan por nuestras vías están en buenas condiciones? Es por eso, que debes protegerte...